jueves, 22 de julio de 2010

El cuarto amarillo

Yo vivía en un cuarto amarillo. Fue el primer lugar en el que viví solo. A pesar de ser muy tímido, conocí a chicas que me llevé a la cama. Parece que el hombre que vive solo le resulta bastante atractivo a las mujeres. Me dedicaba a escribir. Escribía todo el día. Fumaba marihuana. Me masturbaba. Seguía la voluntad de los dioses. Y buscaba el sentido de la vida, y no lo encontraba. Eso me asustaba mucho. Oh mi cuarto amarillo. Mi retiro, mi morada… Mi habitación parecía la habitación de un loco. Desordenada y caótica. El color de mi cuarto revelaba un mal de alma. Era un amarillo enfermizo. Era un amarillo desvaído. Yo esperaba que el color de mi alma no fuese así.

1 comentario:

  1. Y ahora que color conservara tu nueva habitación? Tienes un nuevo cómplice...

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