lunes, 4 de octubre de 2010

Locura divina

Yo soy una locura de Dios
Y cada uno es una locura divina llamada ser humano
La Locura celeste mora en las tinieblas
en las que todo se pierde, en las que
jamás se vuelve a ver lo que se vio
Un lobo flaco, alto y sarnoso
olfatea una estrella muerta
La Luna canta una canción que habla
del amor y del suicidio
Las violetas se enroscan en mis tobillos
Con la razón lisiada me tiendo en la ladera
de un hontanar
La yerba es azul
La Luna se refleja en el agua
El Cielo calla como un animal muerto
El Silencio divino se parece a una tela de araña
El estiércol del Tiempo cae mientras las Horas pasan
El viento hace ruido en la floresta
Soy una locura de Dios
Pronto ya no tendré ojos,
y así veré mejor
Mi razón es un juguete que examino por todas partes
Es una razón enferma mordida por los chacales
mientras dormía
Soy una locura de Dios
Por mis venas corre sangre demente
Y al lado del río fluye mi mente vesánica
¿Cómo escapar de esta clase de Locura?
¿Cómo ver pasar las nubes y sentir
una dulce quemazón en la frente?
Somos locuras de Dios
Quizá seamos inocentes

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