viernes, 3 de septiembre de 2010

Quién soy yo

Díganme, dioses, quién soy yo
Nunca lo he sabido y mi grito repleto de grillos
es trasunto de otro grito perenne, oscuro, callado
Díganme, Ángeles, quién soy yo
Al son de las arpas, frente a la visión beatífica,
háblenme de mí, de mi carencia de alas,
de mi caída de tanto tiempo atrás,
de mi alma que se muere despaciosamente
Díganme, Musas que no existen, quién soy yo
El que escribe es otro que me posee
Y yo me distiendo bajo pórticos en ruinas,
oyendo campanas cuyos tañidos me erizan la piel
Dime , Sol, quién soy yo
Por mis venas fluye tu fuego de cigarras,
tu risa ardiente, tu burla amarilla
Dime quién soy yo,
bajo tu melena rubia y tus pámpanos encendidos
Dime quién soy yo, Luna
Dime tu claridad y hazme comprender la tristeza,
esa tristeza que derrumba hasta los huesos más firmes
¿Acaso soy un pastor errando por una landa
al atardecer?
¿O es que soy un cadáver vivo, mudo, putrefacto?
Dime, Mar, quién soy yo
Dímelo con tus olas que golpean mis sienes
y con tu espuma que calma mi desasosiego
Dime , Dios, quién soy yo
Y también dime quién eres tú
¿Soy acaso un ermitaño penitente
amigo de los cuervos?
¿O soy un accidente, un ente sin causa,
una criatura sin la harmonía del corazón?
Dime , Satán, quién soy yo
Haz que mis rodillas tiemblen al saber
que soy uno que te vendió el alma
sin saberlo
Díganme, árboles, flores, prados, ríos,
colinas, quién soy yo
Quiero morir sabiéndolo
Díganme, pájaros, quién soy yo
Yo que cada mañana me calzo los zapatos para morir
un poco más

No hay comentarios:

Publicar un comentario