jueves, 16 de septiembre de 2010

Un par de desgraciados que se amaron

Juntos veíamos la Luna nacer
Y nacíamos con ella cada día
Cuando yo te tocaba mis manos se llenaban de amor
Y la Luna cantaba su canción bella y triste
Y la Luna cantaba su canto trágico
mientras nacíamos
Una harmonía de flautas llenaba la Noche
recién nacida
Y nosotros, como posesos, buscábamos
los caminos alejados y los sepulcros
Yo te llevaba
Tú ibas conmigo sin chistar
Tenías miedo, pero no me lo decías
Estabas poseída por un dios
No sabíamos nada, sólo nos amábamos
No sabíamos nada, y así estaba bien
Éramos malos
Nos burlábamos de los desgraciados
Éramos malos
Y tan desgraciados
Desde los sepulcros mirábamos las estrellas
y renegábamos de nuestro estar en el Mundo,
de nuestro ser en el Universo
Y odiábamos al Creador
Tú, mirando al Cielo, le mostrabas tus senos
y tu sexo
Y luego llorabas
Llorabas como nadie ha llorado en el Mundo
Yo te abrazaba
Y nos íbamos a ver el Mar rugiente, caótico, nocturno
Y, bajo la Luna, seguíamos naciendo,
dolorosamente

No hay comentarios:

Publicar un comentario